Un año más -¿desde hace ya cuántos?- la Administración española y, arrastrada por ella, las instituciones supuestamente independientes (eso que llaman con tanta fruición "la sociedad civil"), subvencionadas y cobardonas, siguen negando la realidad de la Navidad (excepto para irse de vacaciones) y mandando esas sibilinas incitaciones a que tengamos felices fiestas y, sobre todo, ese deseo casi pueril y prácticamente imposible de que cada año que viene sea estupendo. Por eso, y convencida como estoy de que hoy, más que nunca, se impone conservar las tradiciones, me permito hacer una pequeña antología de la colección de villancicos que empecé en Libertad Digital en el año 2000 y que he seguido enriqueciendo en La quimera desde su creación en noviembre de 2005 para recordar el verdadero sentido de lo que celebra la Navidad.
Los que ahora elijo son más bien poemas de Navidad y los saqué del "Cancionero español de Navidad", publicado por Adolfo Maíllo en 1944 y del opúsculo titulado "La Navidad en España", de José Sanz y Díaz (Publicaciones Españolas, Madrid, 1953) que es una verdadera mina. Ahí van unos cuantos
Airecillos de Belén
Airecillos de Belén,
¡quedito soplad,
pasito corred.
Que llorando suspenso, elevado,
y dormido se ha quedado,
aunque suspira el Niño tal vez:
quedito soplad,
pasito corred,
no, no me lo despertéis.
(De “Villancicos”, Córdoba, 1677)
A los Reyes Magos
Reyes que venís por ellas,
no busquéis estrellas ya;
porque donde el sol está,
no tienen luz las estrellas.
Reyes que venís de Oriente
al oriente del sol sólo,
que más hermoso que Apolo
sale del alba naciente;
mirando sus luces bellas
no sigáis la vuestra ya,
porque donde el sol está,
no tienen luz las estrellas.
(Lope de Vega y Carpio)
Pues que la estrella
Pues que la estrella
es ya llegada
vaya con los reyes
la mi manada.
Vayamos todos juntos
a ver al Mesías,
que vemos cumplidas
ya las profecías;
pues en nuestros días
es ya llegada,
vaya con los reyes
la mi manada,
Llevémosle dones
de grande valor,
vienen los reyes
con tan gran fervor.
Alégrese hoy
nuestra gran zagala,
vaya con los reyes
la mi manada.
No cures, Llorente,
de buscar razón,
para ver que es Dios
aqueste garzón;
dale el corazón
y yo esté empeñada
vaya con los reyes
la mi manada.
Santa Teresa de Jesús
Y ya saben, quiméricos lectores, ¡Felices Pascuas de Navidad y de Reyes! por los siglos de los siglos, amén.
Muchas gracias a los dos, José Luis, Víctor, es muy reconfortante ver que las cosas se quieren transmitir llegan a su destino, y cómo te las devuelven mejoradas.
¡Feliz año!
Publicado por: Julia | 27/12/2016 en 22:01
¡¡FENOMENAL!!, Julia. Como tú, yo celebro los acontecimientos históricos y hoy se conmemora el nacimiento de Jesús y siempre diré FELIZ NAVIDAD y BIENVENIDOS REYES MAGOS, además de desearte, Julia, un AÑO NUEVO SALUDABLE, y olvidar este desesperante 2016.
Publicado por: José Luis Millán | 25/12/2016 en 20:26
Leía anoche una definición de vilanela que hacía el poeta Mark Strand, señalando que el tema de la composición puede ser la ruina pública o privada, pero la forma es, toda ella, recuperación. No puedo pensar mejor composición para estos días. ¡Felices Pascuas, Julia!
Publicado por: Víctor | 24/12/2016 en 14:08